Intestine Baalism – “Anatomy Of The Beast” (ENG)

Repulse Records

9/10

Maybe you don’t expect those short, little and weak persons known as “Japanese” to play extremely brutal Death Metal, but fuck, that’s exactly what these guys do not only play but also master! Formed back in 1991 and after a few lineup changes, this awesome Japanese outfit release their first full-length work, 40 minutes of catchy Death Metal melodies drowned into a sea of brutality. Some melodyc guitar-based lines bring oxygen to their brutal-Death Metal-styled songs, performed under cavernous growlings (along with some Glen Benton-like shoutings) and a grinding drumming. Their combination of brutality and melody is so well achieved that sometimes their music seems to be covers of Judas Priest performed by a Death Metal band! (Check the first riff on “Cannibal Sodom” for evidencies) This album is an authentic masterpiece of Death Metal with several song-shaped molnoliths such as “Anatomy Of The Beast”, “Blasphemy Resurrected” or “A Place Their Gods Left Behind”. The rising sun’ sempire hunts all wimps and trendies, and Intestine Baalism is the most suitable soundtrack for the Nippon massacre!!!

Bliss – “Sin To Skin”

Massacre Records 

Inglaterra tiene una larga y fuerte tradición concreniendo a la música gótica y de su fértil suelo aparecen cada día bandas nuevas pero, como Bliss se encargan de demostrar, la cantidad no va pareja a la calidad. Formados en 1996, después de dos demos consiguieron un contrato con Swan Lake / Massacre para su primer CD. “Sin To Skin” es otra dosis de aburrido goth inglés. La banda lo llama “Depeche Mode heavy” y son de verdad sinceros ya que su música es tan pesada y aburrida como un infierno! Y sobre lo de ‘Depeche Mode’, los DM son una de las peores bandas que jamás han pisado la tierra, así que no es de extrñar que Bliss sólo condigan un 3 sobre 10. La banda pretendidamente está influenciada por los dioses Sisters of Mercy y los Celtic Frost, pero ni tienen la agilidad de los primeros ni el talento de los segundos; en su lugar tienen una falta absoluta de instinto compositor. Ni siquiera la masterización de Alex Krull de los Atrocity aporta nada a este CD.

Bliss no son para nada una bienaventuranza para la escena musical europea, así que no hay problema si se quedan en su isla y no vienen al continente en ningún momento; no merecemos que nos aburran unos típicos, angostos, aburridos y pesados británicos.

Si eres un fanático de bandas como Depeche Mode o The Mission (lo que significaría que no tienes ningún sentido musical), probablemente te guste este CD, pero si ese no es tu caso mejor olvidas este álbum y te gastas las 2500 pelas que te costaría en prive; la elección es mucho mejor, créeme.